Amenaza con un hacha a empleados y clientes de una cafetería porque no le atendían

A. DE LAS HERAS, Bilbao

Eran las diez de la noche del martes. Un individuo, con «aspecto extraño», entró en una cafetería, ubicada en la Avenida de Abaro, en Portugalete. Pidió un 'sol y sombra', copa de anís con coñac. Su aparición levantó enseguida las sospechas de los empleados del local. El intruso comenzó a quejarse por la tardanza del servicio y cuando el dueño del establecimiento se acercó para pedirle que se fuera, se levan
tó del asiento y esgrimió un hacha, según explicaron algunos testigos.



En ese momento, había en el interior de la cafetería unas quince personas, entre empleados y clientes. El hombre armado amenazó a todo el que se cruzaba delante de su camino. Varias mujeres corrieron a esconderse en los baños y el resto de la clientela desapareció presa del miedo.


Descuido


Fue entonces cuando el individuo asestó el primer hachazo contra la barra. De un golpe, rompió el grifo de cerveza, varías botellas y otros objetos. Los desperfectos ocasionados en el establecimiento podrían superar las 50.000 pesetas, según su dueño. Después se dirigió a los camareros, que cogieron los taburetes y los emplearon a modo de «escudos», según afirmó uno de ellos. Logró arrinconarlos, pero estos aprovecharon un momento de descuido del asaltante para apoderarse del hacha y reducirle.


Cuando el hombre recuperó la calma, los responsables de la cafetería comunicaron el incidente a la Ertzaintza. Una patrulla se desplazó al lugar al cabo de diez minutos y procedieron a identificar y detener a P.A.M.B., de 32 años y vecino de Santurtzi. Se le acusa de amenazas con arma y de causar daños en un local público. Según fuentes próximas a la investigación, el arrestado podría haber estado ingresado anteriormente en un centro de salud mental durante un tiempo.